El cuidado del bebé es fundamental para que este pueda crecer de la manera más favorable posible. La alimentación contribuye de una manera muy necesaria para la formación de órganos y tejidos. La salud y el bienestar de los pequeños es influenciada en gran parte por recibir alimentos adecuados en cada proceso de crecimiento. En los primeros momentos es vital la lactancia materna, y luego los sólidos más recomendables.
La pediatra y neonatóloga, María José Castro, remarcó sobre toda esta temática, al afirmar: “El estado nutricional es vital para el desarrollo de los órganos de los bebés prematuros, debido a que los carbohidratos, proteínas, grasas y otros compuestos son la base para la síntesis de estructuras celulares y tejidos corporales”. De esa manera aclaró lo fundamental de prestar mucha atención sobre este aspecto que bajo ningún aspecto puede ser dejad de lado.
Hay que remarcar que es muy importante dedicar una mayor vigilancia sobre aquellos bebés recién nacidos, que no cumplieron los nueve meses de gestación recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS). En estos casos pueden verse interrumpido precozmente el rápido crecimiento fetal, y por esto es que requieren de una mayor dedicación.
En las primeras semanas de vida del niño/a Castro recomendó que se puede complementar de manera temporal la leche materna con una fórmula láctea fortificada con nutrientes importantes, tales como el calcio, fósforo, hierro, vitaminas y proteínas. Si esto se efectúa de una manera apropiada se puede obtener una gran ganancia de peso que vaya acorde a su edad.
Además, esto sirve demasiado para evitar la desnutrición. Este trastorno puede afectar demasiado al desarrollo neurológico y a la formación de estructuras esqueléticas. Ese es el motivo fundamental por el cual se lleva a cabo tanta atención.