El yodo, un elemento esencial para las embarazadas

El yodo es una necesidad fundamental para las mujeres durante el proceso del embarazo. La carencia de este puede afectar a la madre y llevarla al riesgo de poder producirse un aborto o un paro prematuro. Otra de las consecuencias que tiene la ausencia, o poca cantidad, de esta sustancia es que puede ocasionar inconvenientes en su maduración cerebral, daños psicomotores, disminución del coeficiente intelectual, alteraciones auditivas, síndrome de hiperactividad o déficit de atención.

El último documento de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2007 deja a España como un país con una adecuada nutrición en la población, y en cuanto al grupo infantil se cataloga una mejora importante con respecto a estudios que se han realizado anteriormente.

Embarazo

Los doctores aconsejan que se deba ingerir al menos 250 microgramos de yodo por día. Esta cantidad se puede conseguir de una manera muy sencilla si se consume sal yodada. También se recomienda beber leche asiduamente y comer pescado de mar ya que en el mar es en el sitio donde más yodo se concentra.

Además, otra cuestión en la cual hacen hincapié la gran mayoría de médicos es que durante el periodo de gestación la hormona tiroidea es de gran utilidad para que el embrión y el feto puedan realizar una maduración cerebral correcta.