La primavera se acerca, y con ella comienzan a llegar las frutas de temporada a los mercados. Si quieres alimentar a tu bebé de forma nutritiva y natural, no debes dejar pasar la posibilidad de incluir en sus papillas los vegetales que estén en su momento de maduración, ya que conservan toda su carga de vitaminas y sabor, a diferencia de la fruta y verdura que madura en cámaras frigoríficas. Para esto, lo ideal es localizar un establecimiento que comercialice productos locales, frescos, de temporada y de cultivo ecológico. A veces cuestan un poquito más, aunque no siempre, y estarás segura de que tu hijo no entra en contacto con restos de abonos o pesticidas químicos.
A partir de los seis meses de edad, tu hijo ya puede empezar a ingerir determinadas frutas, y las papillas son la mejor opción para que su digestión no sea pesada. El plátano, la manzana, la pera, el melocotón, el membrillo, la piña y la naranja son algunas de las frutas indicadas para esa edad, el mejor momento para comenzar a acostumbrar al bebé a estos alimentos.
Las papillas naturales de frutas de temporada, preparadas por ti misma, son un alimento excelente para nutrir a tu bebé, porque le aportarán muchas vitaminas y fibra, ideales para que su tracto estomacal se vaya fortaleciendo y preparándose para recibir más alimentos sólidos.
Prepara estas papillas justo antes de que tu bebé vaya a comerlas y no les añadas azúcar. No olvides que no debes guardarlas, ya que incluso en el frigorífico pierden muchas de sus cualidades nutritivas y organolépticas.